Dentro del proceso de fabricación de textiles, el trascanado conforma la última de sus fases. Se trata de una técnica que se utiliza mucho para la confección de diversos tejidos para diferentes sectores industriales.

La enorme ventaja que ofrece es que permite reducir el metraje de los rollos de tejido, facilitando así la cadena logística de traslado y almacenamiento de los materiales. Además, esta reducción del metraje supone una gran ventaja competitiva para los tintoreros.

El trascanado en el proceso de fabricación textil

El proceso de fabricación textil consta normalmente de cuatro etapas o fases, en las cuales convertimos la materia prima en tejidos que pueden ser utilizados por distintas industrias. Estas fases se conocen con el nombre de extrusión, urdido, tejido y trascanado.

Durante la fase de extrusión se realiza la producción de hilos monofilamento, que luego se utilizan para la siguiente, el urdido. Es al final de esta donde se realiza el trascanado, el cual consiste en realizar una inspección final a los tejidos que garantice un buen control de calidad.

La parte más importante es el hecho de estandarizar las medidas de los rollos del textil. De esta forma, es posible adaptarlos a las necesidades de cada industria y de cada uno de los productos.

Es muy importante que este proceso esté realizado de manera correcta, ya que luego será necesario someter los textiles al proceso de teñido. Recordemos que los tintes son productos químicos muy abrasivos, capaces de dañar los tejidos.

Por ello, un trascanado perfecto será el responsable de garantizar la calidad y supervivencia del tejido teñido. Gracias a esta técnica se puede contar con muchas posibilidades a nivel de los hilos, ya que permite utilizar tanto hilos finos, elásticos, de seda, entre otros.

La maquinaria en el trascanado

Contar con una maquinaria de excelentes prestaciones es imprescindible para conseguir resultados de calidad. Nuestras máquinas de bobinado textil cuentan con una rosca moderna, que consigue colocar los diferentes hilos de manera perfecta.

Cuentan con un sistema de tensión para cada una de las líneas del hilo, gracias al cual es posible ejercer un control total y personalizado, que se adapte a las necesidades de cada tipo de textil. Además, un accionamiento de tipo directo te facilitará el trabajo de desenrollado del material.

La velocidad mecánica óptima de una máquina de este tipo es de unos 1200 metros por minuto y debe soportar un peso de hasta 8 kilos. En cuanto al diámetro, debe superar los 250 mm. Todas estas automatizaciones te proporcionan excelentes niveles de productividad, resultados óptimos y de muy buena calidad, lo cual repercute de manera favorable en los niveles de rentabilidad de tus productos.

De esta forma, resaltamos la importancia de contar con profesionales experimentados en el proceso de trascanado que puedan ofrecernos productos de calidad para diversos sectores industriales.